Zothique, el Último Continente de Clark Ashton Smith

Bienvenidos a Zothique... el último continente de un mundo moribundo... nuestro mundo.
Valdemar Gótica nº 86

El sol brilla rojizo y cansado, en sus últimos estadios de existencia, y los continentes han sido engullidos por los mares, quedando solitario el ignoto Zothique. La humanidad ha olvidado toda ciencia y han resurgido las oscuras artes de la brujería y la nigromancia. Depravados gobernantes y reyes corruptos gobiernan con tiranía caprichosa sobre las gentes de este mundo, abocadas a la esclavitud, la depresión y el sufrimiento. La religión se ha tornado en una oscura devoción de nigromantes lujuriosos y necrófilos hacia deidades venidas de más allá de las estrellas o resurgidas de profundidades insondables que reclaman su antiguo lugar como señores del planeta.

En estas tierras moribundas encontramos ciudades como Zul-Bha-Sair, donde cualquier persona que muera entre sus muros es ofrecida al dios local, Mordiggian, y a sus monstruosos acólitos, para que devoren la carne putrefacta. Si un marinero no tiene fortuna en su travesía, puede que su nave sea arrastrada por las mágicas corrientes enviadas por los nigromantes de la isla de Naat y esclavizados de por vida para que formen parte de su oscuro séquito de no-muertos. Entre los lugares más temibles de todos se halla La isla de los Torturadores, donde el rey Ildrac y sus súbditos disfrutan torturando de las formas más originales y crueles imaginables a todo aquel que se acerque a sus costas. Lugares lúgubres y terroríficos, personajes crueles y violentos, habitan por doquier el continente perdido de Zothique. Pero también hay lugar para héroes valerosos y guerreros abnegados, siempre dispuestos a entregar su vida por una hermosa princesa... desgraciadamente su esperanza de vida es extremadamente escasa.

Clark Ashton Smith escribió los relatos de Zothique entre 1932 y 1938, siendo todos ellos publicados en la revista Weird Tales (a excepción de uno, The Voyage of King Euvoran, que se publicó en The Double Shadow and Other Fantasies), nos encontramos, pues, ante literatura pulp pura y dura. Literatura pulp con mayúculas.

Clark Ashton Smith
1893-1961
El viajero de lo fantástico
C. A. Smith mantuvo una fluida amistad epistolar con H. P. Lovecraft y Robert E. Howard... y se nota. Me atrevería a pensar que estos tres autores decidieron crear un sutil hilo conector en sus relatos: la existencia y presencia de los seres conocidos como los Primigenios. Más evidentes en las obras de Lovecraft, también se les puede encontrar en relatos de Howard (Conan, Kull) y también se encuentran muy presentes en la saga de Zothique. Puede parecer pueril calificar los relatos de Zothique como una mezcla entre la fantasía heróica de Howard y el terror invencible de Lovecraft, pero no iríamos muy desencaminados, ya que ambas cosas encontramos en ellos. (Nota: que curioso, Howard situaba sus relatos en un pasado remoto de la Tierra; Lovecraft los situaba en el tiempo presente; C. A. Smith los situaba en el futuro más remoto imaginable... curioso, verdad?).

Volviendo a la obra que nos ocupa: la presente edición la conforma los 16 relatos cortos que C. A. Smith escribió sobre Zothique, traducidos para la ocasión por Marta Lila Murillo, trabajo desempeñado de forma excelente y con un profundo conocimiento por este tipo de literatura. Se disfruta (o se sufre, dada la crueldad de algunas historias) cada relato y se saborea en todo momento ese regusto pulp que tanto nos agrada a algunos. La edición que nos ofrece Valdemar es la acostumbrada para esta colección, la Colección Gótica, un auténtico "caramelo" para los aficionados.

Los 16 relatos son absolutamente soberbios, entretenidos y de narrativa ágil. Todos muy inmersivos hasta el punto de provocar zozobra e incomodidad en algunos de sus pasajes: recuerdo con especial inquietud La Isla de los Torturadores y El Tejedor de la Cripta. Así y todo, C. A. Smith deja lugar para el humor (humor negro, por supuesto), que podemos encontrar en forma de pinceladas en relatos como El Señor de los Cangrejos y El viaje del Rey Euvoran. Es, en definitiva, una lectura obligada para todo aficionado a este tipo de literatura e, incluso aquel que no lo sea, pasará unos momentos inolvidables visitando imaginariamente el continente maldito de Zothique... Únicamente deberían abstenerse aquellos lectores de estómago delicado y moralmente sensibles, ya que puede que no logren escapar jamás del hechizo de Zothique.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El Intruso (octubre 2005, Ciclo Onírico)

Los Enigmas Luminosos de Paul Bera

Mutantes de Paul Béra